Yo fui en el Espíritu en el día del Señor. Apocalipsis 1:10.
Porque Señor es del sábado el Hijo del hombre. Mateo 12:8.
El séptimo día es sábado o fiesta del Señor Dios tuyo. Cuarto mandamiento. (Éxodo 20:0-11, versión de Félix Torres Amat)
Y como pasó el sábado. María Magdalena, y María madre de Jacobo... muy de mañana, el primer día de la semana, vienen al sepulcro, ya salido el sol... Y entradas en el sepulcro, vieron un mancebo... Más él les dice: No os asustéis buscáis a Jesús Nazareno, el que fue crucificado; resucitado ha. Marcos 16:1-6.
(Nota: Todo el mundo sabe que el domingo fue el día de la resurrección. El sábado había pasado cuando amaneció. Es, pues, evidente que el sábado es el día anterior al domingo.)
No penséis que he venido para abrogar la ley o los profetas; no he venido para abrogar, sino para cumplir. Mateo 5:17.
Porque de cierto os digo, que hasta que perezca el cielo y la tierra, ni una jota ni una tilde perecerá de la ley, hasta que todas las cosas sean hechas. Mateo 5:18.
El sábado por causa del hombre es hecho. Marcos 2:27
(Nota: El sábado fue hecho y entregado al hombre genéricamente hablando, 1500 años antes de la existencia de cualquier judío.) Véase Génesis 2:1-3.
Y era día de la víspera de la Pascua; y estaba para rayar el sábado. Y las mujeres que con él habían venido de Galilea, siguieron también y vieron el sepulcro, y cómo fue puesto su cuerpo. Y vueltas aparejaron drogas aromáticas y ungüentos, y reposaron el sábado; conforme al mandamiento. Lucas 23:54-56.
Y Pablo, como acostumbraba, entró a ellos, y por tres sábados disputó con ellos de las Escrituras. Hechos 17:2.
Y disputaba en la sinagoga todos los sábados, y persuadía a judíos y a griegos. Hechos 18:4.
Por tanto, queda un reposo para el pueblo de Dios. Porque el que ha entrado en su reposo, también él ha reposado de sus obras, como Dios de las suyas. Hebreos 4:9, 10.
Porque en un cierto lugar dijo así del séptimo día: Y reposó Dios de todas sus obras en el séptimo día. Hebreos 4:4.
Porque no he rehuido de anunciaros todo el consejo de Dios. Hechos 20:27.
(Nota: En el Nuevo Testamento hay nada menos que 59 referencias al sábado. El libro de los Hechos alude a 84 sábados en que el apóstol Pablo y sus asociados realizaron servicios religiosos. Sin embargo, no hay una sola palabra en toda la Biblia que autorice la observancia del domingo.)
Y la [potencia llamada cuerno pequeño] hablará palabras contra el Altísimo... y pensará en mudar los tiempos y la ley. Daniel 7:25.
Pregunta ahora a los sacerdotes acerca de la ley. Hageo 2:11.
Si no tuviera tal poder, no podría haber hecho aquello en que concuerdan todos los modernos eruditos en religión; no podría haber reemplazado la observancia del sábado. Séptimo día de la semana, por la observancia del domingo, primer día de la semana, un cambio para el cual no existe autoridad bíblica. Doctrinal Catechism, página 174.
Observamos el domingo en lugar del sábado porque la Iglesia Católica en el Concilio de Laodicea (364 de J.C.) transfirió la solemnidad del sábado al domingo. The Converts Catechism, Pedro Geirmann, página 50 (Este catecismo recibió la bendición papal el 25 de enero de 1910).
Los congregacionalistas dicen: Es completamente claro que, por rígida o devotamente que pasemos el domingo, no estamos observando el sábado. Dr. R. W. Dale en Ten Commandments, página 106.
Los metodistas: Sábado en el lenguaje hebreo, significa descanso, y es el séptimo día de la semana y debe confesarse que no existe ley en el Nuevo Testamento concerniente al primer día. Diccionario Teológico de Buck.
Los bautistas: Ha existido y existe un mandamiento que ordena guardar el sábado, pero el sábado no era el domingo. Se dirá, sin embargo, y con cierto aire de triunfo, que el sábado fue transferido del séptimo al primer día de la semana. ¿Dónde puede hallarse esta transferencia? No en el Nuevo testamento, absolutamente no… Por supuesto, bien sé que el domingo comenzó a observarse durante la historia cristiana primitiva... Pero es lamentable que haya venido rotulado con la marca del paganismo, y bautizado con el nombre del dios sol, cuando fue adoptado y sancionado por la apostasía papal, y transmitido como un sagrado legado al protestantismo. Dr. E. T. Hiscox, autor del Baptist Manual.
¿No sabéis que a quien os prestáis vosotros mismos por siervos para obedecerle, sois siervos de aquel a quien obedecéis, o del pecado para muerte, o de la obediencia para justicia? Romanos 6:16.
Es menester obedecer a Dios antes que a los hombres. Hechos 5:29.
Así habéis invalidado el mandamiento de Dios con vuestra tradición… Mas en vano me honran, enseñando doctrinas y mandamientos de hombres. Mateo 15:6, 9.
Entrad por la puerta estrecha: porque ancha es la puerta, y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos son los que entran por ella. Porque estrecha es la puerta, y angosto el camino que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan. Mateo 7:13,14.
(Nota: Sólo unos pocos obedecieron a Dios en los días de Noé. en los días de Lot, en los días de Cristo. La mayoría se perdió).
Porque mirad, hermanos vuestra vocación, que no sois muchos sabios según la carne, no muchos poderosos, no muchos nobles; antes lo necio del mundo escogió Dios, para avergonzar a los sabios y lo loco del mundo escogió Dios, para avergonzar a los sabios, y lo flaco del mundo escogió Dios, para avergonzar lo fuerte. 1 Corintios 1:26, 27.
(Nota: Los grandes maestros religiosos en los días de Cristo rechazaron la verdad también. Sus seguidores pertenecían al común del pueblo.)
Empero Dios, habiendo disimulado los tiempos de esta ignorancia, ahora denuncia (manda dice la Reina Valera del 60) a todos los hombres en todos los lugares que se arrepientan. Hechos 17:30.
El que dice, Yo le he conocido y no guarda sus mandamientos, el tal es mentiroso, y no hay verdad en él. 1 Juan 2:4.
Si me amáis guardad mis mandamientos. Juan 14:15.
Porque cualquiera que hubiere guardado toda la ley y ofendiere en un punto, es hecho culpable de todos. Santiago 2:10.
El que dice que está en él, debe andar como él anduvo. 1 Juan 2:6
Y vino a Nazaret, donde había sido criado; y entró, conforme a su costumbre, el día del sábado en la sinagoga, y se levantó a leer. Lucas 4:16.
Yo Jehová, no me mudo. Malaquías 3:6. Jesucristo es el mismo ayer, y hoy, y por los siglos. Hebreos 13:8.
Y consumado, vino a ser causa de eterna salvación a todos los que le obedecen. Hebreos 5:9.
Si quieres entrar en la vida, guarda los mandamientos. Mateo 19:17.
Y bendijo Dios al día séptimo, y lo santificó. Génesis 2:3. El bendijo, y no podré revocarla. Números 23:20. Tú, Jehová, la has bendecido, y será bendita para siempre. 1 Crónicas 17:27.
Hay camino que al hombre parece derecho; empero su fin son caminos de muerte. Proverbios 16:25. Las cosas que son del espíritu... se han de examinar espiritualmente. 1 Corintios 2: 13, 14.
No todo el que me dice: Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos: mas el que hiciere la voluntad de mi Padre que está en los cielos. Mateo 7:21.
El que aparta su oído para no oír la ley, su oración también es abominable. Proverbios 28:9.
Muchos me dirán en aquel día: Señor, Señor, ¿no profetizamos en tu nombre, y en tu nombre lanzamos demonios, y en tu nombre hicimos muchos milagros? Y entonces les protestaré: Nunca os conocí; apartaos de mí, obradores de maldad. Mateo 7:22, 23.
(Nota: La expresión “obradores de maldad” en griego es ANOMIA y literalmente se traduce como “violadores de la ley”)
¿Qué aprovechará al hombre, si granjeare todo el mundo, y pierde su alma? Marcos 8:36.
Vuestro Padre celestial sabe que de todas estas cosas habéis menester. Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. Mateo 6:32, 33. No he visto justo desamparado, ni su simiente que mendigue pan. Salmos 37:25.
Bienaventurados sois cuando os vituperen... y dijeren de vosotros todo mal por mi causa mintiendo. Gozaos y alegraos, porque vuestra merced es grande en los cielos. Mateo 5:11, 12. Si el mundo os aborrece, sabed que a mí me aborreció antes que a vosotros. Juan 15:18.
El que ama padre o madre más que a mí, no es digno de mí; y el que ama hijo o hija más que a mí, no es digno de mí. Y el que no toma su cruz, y sigue en pos de mí, no es digno de mí. Mateo 10:37, 38. Así pues, cualquiera de vosotros que no renuncia a todas las cosas que posee, no puede ser mi discípulo. Lucas 14:33.
Bástate en mi gracia; porque mi poder en la debilidad se perfecciona... Cuando soy débil, entonces soy poderoso. 2 Corintios 12:9,10. Todo lo puedo en Cristo que me fortalece. Filipenses 4:13.
Nadie hay que haya dejado casa, padres, o hermanos, o mujer, o hijos, por el reino de Dios, que no haya de recibir mucho más en este tiempo, y en el siglo venidero la vida eterna. Lucas 18:29,30. Bienaventurados los que guardan sus mandamientos, para que su potencia sea en el árbol de la vida, y que entren por las puertas en la ciudad. Apocalipsis 22:14.
Porque como los cielos nuevos y la nueva tierra, que yo hago, permanecen delante de mí, dice Jehová, así permanecerá vuestra simiente y vuestro nombre. Y será que, de mes en mes, y de sábado en sábado, vendrá toda carne a adorar delante de mí, dijo Jehová. Isaías 66:22,23.
Bien, buen siervo y fiel. Mateo 25:21.