1. La crisis final es el choque entre la ley de Dios y la ley del hombre
Explicación: Todo lo presentado anteriormente converge en una confrontación global donde el mundo adoptará una ley religiosa contraria a los mandamientos de Dios. El conflicto será espiritual, moral, político y económico simultáneamente.
2. Un falso avivamiento mundial engañará a las naciones
(Apocalipsis 13:13-14) “Hace grandes señales… hace descender fuego del cielo… y engaña a los moradores de la tierra con las señales…”
Explicación: Antes del decreto final habrá un movimiento espiritual poderoso, lleno de milagros falsos, señales aparentes y manifestaciones sobrenaturales que aparentarán ser obra de Dios. Este es el engaño que prepara el terreno para la imposición religiosa.
3. El decreto dominical mundial será la ley que divide a la humanidad
(Daniel 7:25) “Pensará en cambiar los tiempos y la ley.”
(Apocalipsis 13:12) “Hace que la tierra… adore a la primera bestia.”
Explicación: La religión mundial unificada impondrá el domingo como día obligatorio de adoración. Será presentado como una solución de paz, moral y unidad global, pero será una rebelión directa contra la ley de Dios.
Dato: La propuesta moderna del llamado “domingo climático” —presentada como un día de descanso social y ecológico— puede considerarse un antecedente cultural y conceptual hacia la idea de una futura ley dominical de carácter obligatorio. No se trata de algo totalmente nuevo, pues en la historia ya han existido leyes dominicales coercitivas tanto en Europa como en Estados Unidos, donde el descanso dominical fue impuesto por mandato civil y, en ocasiones, con respaldo religioso. Estos precedentes demuestran que la regulación estatal del día de reposo no es una especulación teórica, sino una realidad histórica que podría resurgir bajo nuevos argumentos, especialmente ambientales, económicos o sociales.
4. La coerción económica será universal: sin la marca no se podrá comprar ni vender
(Apocalipsis 13:17) “Que ninguno pudiese comprar ni vender, sino el que tuviese la marca…”
El decreto dominical irá acompañado de restricciones económicas:
El sistema ya está en preparación.
5. La persecución será legal, sistemática y global
(Apocalipsis 13:15) “Hizo que… fuesen muertos los que no adorasen la imagen…”
La imagen de la bestia reproducirá el antiguo modelo Iglesia–Estado. No será desorden sino ley estructurada: multas, restricciones, detenciones y finalmente persecución abierta contra quienes rechacen el decreto.
6. El fuerte pregón del tercer ángel será la última advertencia mundial
(Apocalipsis 14:6-12) “Temed a Dios… Ha caído Babilonia… Si alguno adora a la bestia…”
Explicación: Mientras el mundo se rinde al sistema falso, Dios enviará una proclamación global con poder del Espíritu Santo. La verdad brillará, el sábado será exaltado y millones serán llamados a la decisión final.
7. El cierre de gracia marcará el fin de toda oportunidad de salvación
(Apocalipsis 22:11) “El que es injusto, sea injusto todavía… y el que es santo, santifíquese todavía.”
Explicación: Cuando cada persona haya tomado una posición, Cristo concluirá Su intercesión. La puerta se cerrará como en los días de Noé. Allí queda fijo quién tiene el sello de Dios y quién tiene la marca de la bestia.
8. El tiempo de angustia será el mayor conflicto de la historia humana
(Daniel 12:1) “Habrá tiempo de angustia, cual nunca fue…”
(Apocalipsis 7:1) describe a los ángeles soltando los cuatro vientos.
Explicación: Con la gracia cerrada, la protección divina se retira. Las siete plagas caen sobre quienes rechazaron el sello de Dios. Caos, crisis, desastres y colapso mundial sacuden al planeta, pero los sellados son protegidos completamente.
9. Dios liberará a Su pueblo de manera sobrenatural
Explicación: Como en el mar Rojo, el foso de los leones y el horno de fuego, Dios intervendrá directamente. Cristo aparece, las leyes humanas pierden su poder, la persecución cesa y los fieles son vindicados ante todo el universo.
La crisis final revelará el carácter de cada ser humano. La imposición dominical, el control económico global, la persecución y el cierre de gracia conducirán al tiempo de angustia y a la liberación gloriosa del pueblo de Dios. Este capítulo marca el comienzo del desenlace profético y abre paso al juicio final de Babilonia y al retorno de Cristo como Rey.